domingo, 30 de marzo de 2014

EL IMPACTO DE LOS ESTEREOTIPO Y ACTITUDES CONTRA LA VEJEZ EN PERSONAS MAYORES.


La amplitud y falta de especificación de los estereotipos de la vejez, ha sido demostrada en una serie de estudios de laboratorio, en los que se ha encontrado que un conjunto de estímulos positivos y negativos, con una significación generalizada de sabio versus senil, puede dar lugar a la mejora o al deterioro, respectivamente, de un numeroso grupo de funciones cognitivas y conductuales, que pueden incluso afectar aspectos fisiológicos de las personas mayores (Hausdorff et al.,1999). Tales experimentos se han realizado en campos tan diferentes como la memoria, la velocidad de la marcha, la escritura a mano, la función cardiovascular, el rendimiento en matemáticas y en lenguaje, el deseo de vivir o la percepción de otros ancianos.
A continuación desarrollare algunos de estos experimentos :
-Efectos en la memoria.- Hess et al. (2003) han confirmado los resultados de Levy (1996) en un estudio con estereotipos explícitos de la vejez. En esta investigación, los participantes, jóvenes y mayores, fueron asignados a tres grupos de diferentes condiciones de estereotipo: positivo, control y negativo. A los participantes en la condición negativa se les dio información sobre estudios recientes que ofrecían datos de que la vejez tiene efectos negativos en la memoria. En cambio a los participantes en la condición positiva se les daban  datos de estudios en los que los resultados mostraban que la memoria no resulta afectada necesariamente. Hess et al. (2003) encontraron que la exposición a estereotipos negativos explícitos de la vejez daba como resultado un menor rendimiento de memoria entre los participantes mayores, en contraste con los que no eran expuestos, ellos así como con los participantes jóvenes que eran expuestos, en los cuales no influían los estereotipos.
- Efectos en la percepción de otras personas mayores.-Levy (1996) encontró que las interpretaciones que las personas mayores hacen de determinadas situaciones, pueden aparecer afectadas por los estereotipos implícitos de la vejez. Esta autora diseñó un estudio en el que se presentaba a los participantes un relato sobre una mujer de 73 años que contenía detalles ambiguos, de tal forma que podían ser interpretados en direcciones opuestas. Por ejemplo, en la historia se contaba que la mujer pasaba la noche en la casa de su hermana. De esta situación, los participantes mayores que estaban expuestos a estereotipos positivos de la vejez, tendían a interpretar que esa mujer era un miembro de la familia que podía proporcionar servicios útiles a todos. En cambio, los participantes que habían sido expuestos a estereotipos negativos, tendían a interpretar la historia en el sentido de que la mujer era dependiente de los recursos de su hermana. Este resultado hace sugerir que los estereotipos implícitos de la vejez pueden influenciar la autopercepción de las personas mayores.
-Efectos en el deseo de vivir: hay estudios que han demostrado que las creencias religiosas, así como las específicas de una cultura pueden afectar al deseo de vivir de las personas. Por ejemplo, Phillips y King (1988) o Phillips y Smith (1990) han encontrado, estudiando determinados grupos culturales, que es más fácil que las personas muy ancianas o con determinadas enfermedades graves, mueran después de las fiestas que tienen una significación especial para esa cultura, que en los días previos a dichas celebraciones. Levy et al. (2000) sostienen que existen una serie de creencias sobre la vejez que se interiorizan desde temprana edad y que son reforzadas a lo largo de la vida, sobretodo en la propia vejez. Una de estas creencias es la que considera que existe una relación inversa entre el valor de la vida y su longitud, lo que afecta a las personas más mayores. Partiendo de la idea anteriormente señalada, de que las personas desean morir cuando las pérdidas percibidas sobrepasan a la percepción de los beneficios de la vida, estos autores han demostrado que la activación de los estereotipos de la vejez influye en el deseo de vivir de los adultos mayores.

No hay comentarios:

Publicar un comentario