viernes, 27 de junio de 2014

EL PSICOLOGO EN EL ASILO

En gran cantidad de asilos podemos encontrar personal médico, de enfermería y de trabajo social, pero constantemente se aprecia la ausencia de un profesional de gran importancia; el Psicólogo, y es de gran importancia su presencia debido a las condiciones emocionales por las que atraviesan las personas que se encuentran internadas en tales lugares, pues algunas de ellas lo están por decisión propia, pero otras lo deben al abandono de sus familiares, al desamparo económico en el que se hayan y, en algunos lugares al sobrecuerpo en los hospitales. Otra importante razón por la que la labor de un Psicólogo en un asilo resulta indispensable es que su trabajo no solo consistirá en atender las necesidades emocionales, afectivas y terapéuticas de las personas mayores que residen ahí, sino también impartirá a todo el personal que allí labora los conocimientos referentes a las relaciones humanas para aprender a convivir con los pacientes y poder ofrecerles no solo atención física sino también emocional.

Otra parte importante en donde el Psicólogo es parte fundamental es que en instituciones de este tipo donde vive gente de la tercera edad, se considera a la terapia ocupacional como parte vital del programa psicológico, utilizándose para ello diversa técnicas que tratan de readaptar al anciano en su ámbito social y combatir su dependencia.

SEXUALIDAD EN LA VEJEZ

Los factores psicológicos que afectan la sexualidad de las personas jóvenes también suelen afectar la sexualidad de los adultos mayores. Lo anterior quiere decir que antes los cambios que se producen con el avance de la edad, el significado que las personas le dan a éstos, determinan el impacto de los mismos. Los adultos mayores de hoy pertenecen a una generación donde no existía la educación sexual. No existía una instancia formal, o información seria al respecto. La vida sexual pertenecía al ámbito de lo privado y consistía habitualmente en la satisfacción por parte del hombre y la disponibilidad por parte de la mujer. La desinformación respecto de la sexualidad en esta etapa, la ansiedad que la adaptación a estos cambios genera y la dinámica y los conflictos de pareja pueden constituirse en factores de disfuncionalidad en el ámbito sexual. En nuestra sociedad existe una actitud negativa hacia la expresión sexual de los ancianos, no parece apropiada en los mayores de 70 años y para que señalar la masturbación. Estas actitudes afectan la forma en que los Adultos mayores son tratados y cuando éstas se internalizan por los ancianos pueden convertirse en una razón muy importante que explicaría el por qué muchos adultos mayores son sexualmente inactivos (Cayo y Flores 2003)”.
Los adultos mayores tienen la misma capacidad de establecer cualquier vínculo, incluido los amorosos de pareja como en otras edades y cuando tienen oportunidades de practicar formas de vinculación como coquetear, “andar”, pololear o emparejarse, para ellos es muy satisfactorio.

 En esta etapa, sin duda, la sexualidad en la pareja está cruzada por los sentimientos de compañerismo, reciprocidad y amor. Se ama de manera más auténtica y comprometida.

ENFERMEDAD DE PARKINSON EN LA VEJEZ

El Mal de Parkinson (MP) es un desorden neurológico que ocurre cuando la mayoría del las neuronas (80%) de una estructura del cerebro medio productora de dopamina (que controla el movimiento de los músculos), mueren o se dañan. A diferencia de otras enfermedades, el MP afecta a hombres y mujeres por igual, sin importar el origen étnico ni la condición social. Cerca del 1% de los adultos mayores sufre de este mal, registrándose aproximadamente 60.000 nuevos casos cada año.
Síntomas
El síntoma más común del MP es el temblor persistente del cuerpo, aunque la lentitud, la rigidez y problemas de equilibrio son también indicadores, al igual que los calambres en las manos, el arrastrar los pies, la rigidez facial, la dificultad para hablar y la depresión. Comúnmente, los primeros síntomas son suaves, afectando a una mitad del cuerpo primero. Pero, al igual que el Alzheimer, la condición del paciente va empeorando con el tiempo. A medida que la enfermedad avanza, los temblores se van extendiendo a ambos lados del cuerpo, dificultando la realización de las actividades rutinarias.
Diagnóstico
Es difícil hacer un diagnóstico certero del MP, debido a que los síntomas varían significativamente entre pacientes y a que ni los rayos-x ni los exámenes de sangre revelan esa condición. Según estudios, entre el 5 y 10 % de los afectados tiene antecedentes familiares de esta enfermedad. Otro 35 % presenta lo denominado Parkinsonismo, que es el desarrollo de los síntomas del MP –como temblores- sin padecer el mal. Una visita oportuna al neurólogo apenas se noten los primeros síntomas es de vital importancia para determinar un tratamiento efectivo. En ésta, el médico debería realizar un examen neurológico apropiado y revisar la historia médica completa del paciente.
Tratamiento
Aunque el MP es una enfermedad progresiva e irreversible, existen varios medicamentos que se usan para tratar sus síntomas y que han resultado ser bastante efectivos en la mayoría de los casos. Lo primero que suele usarse es la levodopa, que se convierte en dopamina en el cerebro, reemplazando así la falta de este neurotransmisor. Se suele aplicar junto a la carbidopa, que ayuda a la absorción de la levodopa y disminuye algunos efectos secundarios. Los agonistas dopaminérgicos imitan la función de la dopamina induciendo a las neuronas afectadas a comportarse normalmente. El mal de parkinson afecta a todas las facetas de la vida del paciente, pero se puede controlar con una terapia adecuada.

Debido a que los pacientes con el MP tienden a sufrir una tremenda ansiedad consientes que la enfermedad es irreversible, es común que se encierren en ellos mismos, haciendo más difícil la tarea de los familiares de apoyarlos y darles consuelo. Sin embargo, es importante no rendirse en esta labor y hacer que el paciente tenga contacto con otras personas con el mismo mal.

PSICOMOTRICIDAD Y SU RELEVANCIA EN LA VEJEZ

El aprendizaje de habilidades motoras es muy importante ya que casi todas las actividades que realizamos en nuestra vida cotidiana pertenecen a esta categoría ( vestirse, lavarse, utilizar el teléfono, conducir un vehículo, …). La mayor parte de estos aprendizajes son conductas que requieren esfuerzo y consumen muchos recursos cognitivos, pero una vez adquiridos durante la niñez o juventud, suelen mantenerse durante toda la vida a menos que exista alguna accidente o enfermedad, aunque hay  que tener en cuenta que se produce una disminución de la velocidad a la que se ejecutan estos aprendizajes.
Pero, ¿qué sucede con los aprendizajes nuevos que se realizan a una edad avanzada? Numerosos estudios han mostrado que con la edad se produce un enlentecimiento general de las actividades motoras. Salthouse (1996) dice que esto se debe a una disminución generalizada de la velocidad para realizar actividades mentales.
Tareas visomotoras complejas como conducir un coche requieren una respuesta continua consistente en la coordinación de numerosos movimientos de distintas partes del cuerpo en función de una información visual cambiante de un momento a otro. En el laboratorio se ha estudiado en condiciones controladas la actuación en una tarea de aprendizaje motor que simula en parte actividades motoras de la vida real. En este estudio, en el que participaron jóvenes y personas mayores, resultó que esta tarea de aprendizaje motor resultó especialmente difícil para el grupo de más edad.
También se ha comprobado que personas que han sido expertas en la realización de una determinada actividad durante toda su vida como escribir a máquina o tocar el piano pueden mantener su nivel de ejecución en la vejez (Salthouse, 1984). Se cree que este mantenimiento del nivel de ejecución se debe a un proceso compensatorio del enlentecimiento motor. El experto ha automatizado los movimientos necesarios para realizar una tarea de manera que su ejecución apenas consume recursos cognitivos.

Sería interesante averiguar que otras habilidades motoras se mantienen inalterables con las personas mayores cuando estas han sido expertas en estas actividades en su vida.

miércoles, 25 de junio de 2014

ASPECTOS PSICOAFECTIVOS DEL ENVEJECMIENTO

Antes de entrar en el tema propiamente psicológico, recordemos, aunque sea en forma esquemática, algunos aspectos bien conocidos de la sociedad actual, lo cual nos permitirá a su vez situar el escenario en el que se mueven los protagonistas de la acción.
Rasgos de la sociedad actual:
1. Es altamente competitiva.-En un tipo de sociedad así, predomina la dialéctica de la producción y el consumo, de la oferta y la demanda. Se entiende que para ser tomado en cuenta hay que producir y hay que consumir.
2. Es efectista.- Se buscan resultados buenos (es decir, útiles) e inmediatos. Lo no útil, lo que no tiene inmediatamente aplicaciones prácticas, no se considera importante.
3. Es una sociedad "acelerada".- Los estudiosos de las transformaciones sociales aseguran que vivimos una aceleración histórica sin precedentes: las transformaciones tecnológicas, sociales, políticas, económicas, culturales a las que asistimos, son casi vertiginosas. Se habla de un síntoma psicosociológico denominado "shock de futuro" y que consistiría en una especie de miedo de muchas personas a quedar atrasadas, a no vivir no ya el presente sino alejadas del futuro.
4. Es una sociedad de familia nuclear.-Ya en la mayoría de los lugares ha perdido vigor la antigua familia extensa, la familia de la casa grande, casi patriarcal, en la que compartían naturalmente abuelos, padres e hijos, y a veces tíos y primos.
Vistos a grandes trazos algunos de los rasgos de la sociedad actual, podemos ahora referirnos a algunos aspectos psicológicos del adulto mayor. Ellos se relacionan con la manera que el individuo, enfrentado a la realidad de su envejecimiento, tiene de percibirse a sí mismo.
1. Pérdida de Autoestima.-Sabemos que la manera de percibirse es lo que permite la propia evaluación, y que este último (propia evaluación) es el proceso psíquico conocido como Autoestima.
2. Pérdida del significado o sentido de la vida.- el vacío existencial es la neurosis masiva de nuestro tiempo; ella se produce cuando el propio ser, la propia existencia, carece de significación. Una vivencia tal acerca del propio Yo, puede desencadenar una serie de síntomas depresivos.
3. Pérdida de la facilidad de adaptación.-Al llegar a una edad mayor, la persona va viendo cómo los ambientes van cambiando para ella, y cómo otros le son lejanos o por lo menos le ofrecen menos interés.
Ante todo, el adulto mayor, la persona de tercera edad, el anciano, es protagonista de su propia vida y de su propia salud física y psíquica. Evitar en este campo, como en todos, actitudes paternalistas en las que la solución viniera desde otras esferas ajenas a los mismos protagonistas, es ya una buena medida preventiva. Todas las instancias de la sociedad deben relacionarse y conectar entre sí para producir "redes de seguridad" en beneficio de los seres más desvalidos, pero cuidando que los mismos sujetos sean agentes de su propia liberación.
1. Educación en la verdad.-De ahí que una de las primeras medidas preventivas en salud psíquica, promotora de hombres psicológicamente sanos, sea la de la buena educación.
2. Verdad de la tercera edad y del envejecimiento.-Hemos visto aspectos negativos de esta edad, y sobre todo los sentimientos derivados de la autopercepción que el individuo tiene de sí mismo al llegar la edad de su retiro y jubilación.

3. Desarrollo de una Actitud Abierta.-En consonancia con la propia verdad, el anciano, apoyado en esas experiencias previas que le han permitido desarrollar y consolidar sentimientos de autoestima, así como sentimientos positivos acerca del mundo y de las otras personas, es capaz de mantener a estas alturas de su vida, los sentimientos básicos para un ideal funcionamiento y una saludable existencia psíquica hasta el fin de sus días.

APRENDIZAJE EN EL ADULTO MAYOR

En el aprendizaje del adulto mayor se debe tener en cuenta, que el anciano necesita más tiempo. El aprendizaje en esta etapa debe individualizarse para lograr su objetivo ya que los adultos mayores presentan limitaciones intelectuales. Su inteligencia es cristalizada y no fluida, por lo cual varía su forma de aprender, se ha probado que con ejercitación se puede aprender en esta etapa de la vida.
La memoria a corto plazo está afectada, la memoria de fijación se manifiesta por ser un problema de entrenamiento, si se deja de conversar, de leer, y de hacer valoraciones porque ha dejado la vida productiva se convierte en un individuo jubilado que se aísla.
La velocidad se muestra diferente debido a su declinación; es la motivación la característica principal del aprendizaje para este grupo de edades. En el caso del adulto mayor cubano, se expresa su deseo de hacer y de reinsertarse en la sociedad, el mismo se incentiva fuertemente con cada tarea, y para ello potencia lo afectivo.
En la esfera motivacional afectiva se establecen regularidades, en tanto la personalidad del adulto mayor es el resultado de las experiencias vividas por cada sujeto en particular en los períodos anteriores de su ciclo vital, no obstante es posible señalar algunas consideraciones al respecto:
  • Las necesidades de los adultos mayores están expresadas en el saber distinguir entre lo esencial y lo superfluo, y tener en cuenta sus condiciones de existencia como una necesidad, lo cual les permite evitar las frustraciones.

  • En el adulto mayor los intereses, así como las aspiraciones se pueden ver disminuidas a causa de la relatividad de la proyección futura de este sujeto, dada su edad.
  • Es indiscutible que la autovaloración y por consiguiente la autoestima, considerada como la imagen que se tiene de sí mismo, dependen en cada adulto mayor del modelo de envejecimiento que éste asume, o le transfiera su medio familiar y social

INCONTINENCIA URINARIA COMO ABORDARLA

La edad es uno de los factores que facilita la pérdida de orina. Entre los 40 y los 65 años la enfermedad se manifiesta con mayor frecuencia, ya que con el paso el tiempo los ligamentos que soportan la uretra se van debilitando.
Este mal -que puede aquejar a una de cada tres mujeres durante su vida- sí tiene solución.la cirugía se realiza en los casos en que la incontinencia por esfuerzo afecta de manera significativa la calidad de vida de la paciente y el tratamiento kinésico ha fallado. Consiste en poner una malla sintética debajo de la uretra para limitar la hipermovilidad producida por los ligamentos flojos. Las tasas de éxito de este tipo de cirugías son muy altas y funcionan en un 90 por ciento de los casos. La persona puede orinar de manera normal y si tose o hace fuerza no pierde orina.
Los especialistas que explican que la obesidad y los malos hábitos como fumar, también son elementos que favorecen esta patología. - toda la carga del abdomen descansa en el periné o piso pelviano, lo que lleva a que se debiliten los ligamentos e induce a la incontinencia por esfuerzo. También hay personas que padecen tos crónica, por lo que de manera constante hacen fuerza y disminuyen así la capacidad de estos ligamentos.
La buena noticia es que cuando se detecta el problema en una etapa inicial, se puede tratar con excelentes resultados. Esto se hace corrigiendo algunos factores como el sobrepeso y el manejo de la tos. Además se hace una reeducación de los músculos del periné para contener mejor la orina. Los Ejercicios de Kegel son una buena alternativa, sobre todo porque después de un tiempo de aprendizaje las pacientes los pueden realizar en su casase pueden hacer de diferentes formas. Todos se basan en contraer y relajar, en reiteradas ocasiones y a distintos ritmos, los músculos del piso pélvico. El objetivo es incrementar su fuerza y resistencia. Esto nos ayuda a prevenir o corregir la incontinencia urinaria por esfuerzo, incontinencia anal, algunos prolapsos y disfunciones sexuales”.
Aspectos psicológicos
Esta enfermedad influye mucho en la calidad de vida de los adultos. Existe una permanente incomodidad y malestar con su cuerpo. Se sienten sucios y eso va en desmedro de su autoestima. Las personas pierden el control de su cuerpo, lo que repercute sobre todo en la intimidad. -Los pacientes se limitan al tener relaciones sexuales o, durante el acto sexual, piensan constantemente que se van a orinar y eso no les permite disfrutar. Una vez que la incontinencia es asistida con el debido tratamiento, hay una evolución positiva en el paciente.
En términos generales, para poner en práctica estos ejercicios, deben acostarse de espalda, con los pies planos en el suelo, las rodillas dobladas y separadas. Luego tienen que mantener la espalda apoyada sin dejar ningún espacio en la zona lumbar. En esa posición debe contraer lentamente los músculos del periné, mantener -respirando tranquila- y luego soltar despacio, descansar y repetir.
Hay tres tipos de Ejercicios de Kegel:
Lento: consiste en apretar los músculos del piso pélvico como cuando se intenta cortar la orina. Éstos se deben subir, contraer y mantener. Contar hasta cinco y respirar suave. Luego descansar durante cinco segundos. Repetir 10 veces.
Rápido: se trata de retraer y soltar los músculos tan rápido como se pueda hasta completar dos minutos. Repetir cuatro veces al día.
La escala: se logra al contraer los músculos suavemente. Al hacerlo la mujer puede imaginar que va subiendo un primer peldaño. Luego debe descansar un segundo, sin relajar la musculatura, y continuar con el siguiente escalón contrayendo un poco más. Se repite la acción hasta completar cinco peldaños. Entonces se comienza a bajar soltando los músculos muy suave, con un descanso de un segundo cada vez. Al llegar abajo se debe relajar el músculo por completo durante algunos segundos y repetir 10 veces. No olvidar que hay que respirar con mucha tranquilidad, pausadamente y sin ayuda de los glúteos y abdominales.